Llegan iPads al salón.
Jorge Alberto García. El Norte. Colegios. 22/01/2012. Por su funcionalidad y fácil manejo, el uso del iPad se extiende poco a poco en los hogares y en lugares de trabajo, entonces ¿por qué no iba a estar presente en el salón de clases?
Varias instituciones de la Ciudad, como el Colegio Euroamericano, el American Institute de Monterrey y el Colegio José Garza, entre otros, han implementado o están por hacerlo, el sofisticado dispositivo electrónico de Apple, como herramienta de apoyo para aprender, conectarse, comunicarse y crear.
“Desde que inició el ciclo escolar en agosto comenzamos a trabajar con él, luego de estudiar varios casos de escuelas que lo han introducido donde los resultados han sido exitosos”, comenta Alline Sada, encargada de tecnología educativa del colegio Euroamericano.
La gran variedad de aplicaciones enfocadas a la educación que existen, además de su pantalla multitouch y peso ligero, la convierten en una herramienta útil además de atractiva, en el proceso de aprendizaje para estas instituciones.
A nivel preescolar, las aplicaciones suelen ser genéricas y con un objetivo didáctico sencillo, pero que resulta crucial en el aprendizaje, como dibujar, memorizar las letras de abecedario o los números e identificar figuras o patrones.
En primaria, el iPad tiene aplicaciones para todas las materias como español, inglés, historia y matemáticas, así como las ciencias.
En secundaria se vuelven más complejas y están orientadas a alcanzar una mejor redacción y ortografía, con imágenes como mapas conceptuales, planetas, la tabla periódica, o los diferentes sistemas que componen el cuerpo humano, además de juegos que estimulan el pensamiento y la memoria.
SU USO En el Euro, un sistema de citas y reservaciones permite a los maestros separar hasta dos carritos con 26 iPads cada uno, y que recorren los salones del instituto educativo, desde los grados de prenursery, hasta tercero de secundaria, para ser utilizados en clase, el tiempo que lo requiera el profesor en turno. “Falta que empiecen a usarla los más chiquitos de 2 años y medio”, comenta Sada.
En el American Institute of Monterrey, los alumnos de preescolar trabajan en procesos psicomotores para reforzar trazos. “Se utilizan en todas las materias con vinculación al currículum, ya sea para la introducción al tema o para reforzar el mismo, de tal manera que el alumno está utilizando su dispositivo móvil todos los días 2, afirma Guadalupe Mendoza de González, directora de tecnología del AIM. Esta institución educativa ya posee experiencia con productos de Apple, ya que desde 2010 agregó el iPad para reforzar otras estrategias, como el uso de flashcards y la creación de historietas digitales.
Las maestras de Bambolino 2 a Kínder 3 del Oakhill Preschool del Colegio CECVAC, aprovechan la tableta para potenciar el desarrollo de habilidades lógico-matemáticas, de percepción visual y auditiva, lecto-escritura e inglés. En primaria superior se usan para reforzar los contenidos académicos de los programas de inglés, matemáticas, ciencias e historia.
En cambio, el Colegio José Garza Garza adoptó el Sistema UNO, propuesta educativa del Grupo Editorial Santillana, que le permitirá adoptar el iPad de manera paulatina en los estudiantes de preescolar y primaria. “Existen dos modalidades: una es que tanto alumnos como maestros utilicen el iPad y otra qué sólo sea el maestro, mientras los niños observan cómo lo manipula por medio de un sistema digital. “En nuestro caso decidimos hacerlo de esta manera por los próximos dos ciclos escolares, para revisar el programa y decidir si nos quedamos con él”, explica Gustavo Alfredo Sepúlveda, director general académico de la institución.
SU IMPACTO Antes de introducirla, en varios colegios se realizó una labor de revisión y prueba de cientos de apps con el propósito de integrar un directorio. En el Euro esta cifra asciende a más de mil 300.
“Antes de introducirlas, los maestros recibieron la capacitación necesaria para explicarles su funcionamiento y también hicieron su propia selección de aplicaciones más útiles para sus materias. Al principio muchos niños no la sabían usar, pero en menos de una hora le agarraron la onda como si supieran de toda la vida, batallaron menos que las maestras”, explica Sada.
Desde su implementación, las mejoras fueron notorias en la resolución de una mayor cantidad de operaciones matemáticas en menos tiempo y en la disciplina, ya que los niños más traviesos se comportan mejor en cuanto tienen en sus manos el aparato. “Están más enganchados: cuando llegan al salón ya saben que hay que sentarse, recibir instrucciones y trabajar con ellas”, afirma Stephany Garza, maestra de prekínder de esa institución.
Las autoridades educativas sostienen que el iPad es una herramienta eficaz para detectar a niños precoces o con dificultades académicas, lo que les permite ponerles especial atención. “En vez de poner al niño a escribir, de una manera táctil, ellos manejan muchas aplicaciones que ellos piensan que están jugando, pero en realidad están aprendiendo, entonces como apoyo es buenísimo”, señala Romi Hinojosa Martínez, maestra de computación.
Y LOS PAPÁS: ¡A INVOLUCRARSE! A pesar de todas sus bondades, las autoridades académicas coinciden en que introducir un gadget novedoso no es suficiente para mejorar la educación, ya que sólo puede ser un coadyuvante que bien aprovechado puede ser de gran utilidad.
“El papá se acerca y le pregunta a su hijo qué está haciendo con el iPad. Hemos visto en los papás un interés por saber qué está haciendo el niño, primero por supervisar lo que está haciendo y luego por compartirlo con él”, explica Sada.
Para aprovecharlo de la mejor manera, alumnos, maestros, la administración escolar y, especialmente, los padres de familia, deben involucrarse en su utilización.
“Ellos nos piden que les demos clase de computación, que les compartamos el listado de las apps, algo que ya hemos hecho; en el periódico del colegio sugerimos 3 apps para que vayan probando los papás y sepan lo que estamos viviendo”, dice la encargada de tecnología educativa del Euro.
Para Sepúlveda, del Colegio José Garza Garza, los niños de la “Generación Google”, es decir, los nacidos a mediados de los 90 a la fecha, están totalmente inmersos en la cultura audiovisual y se muestran ávidos por aprender y manejar lo último en tecnología, pero los colegios no pueden olvidar lo fundamental: que aprendan con él.
“Lo más importante para nosotros es que se utilice para enriquecer el currículo y apoyar el aprendizaje, que sea significativo y efectivo, no solamente ‘usar por usar’”, coincide Sada.
Sí, pero con cuidado
Jorge Alberto García. El Norte. Colegios. 22/01/2012. Las autoridades escolares deben trabajar en conjunto con padres de familia y expertos en tecnología para sacar el mejor provecho al iPad y minimizar los riesgos que pudieran presentarse, afirma el pedagogo Ismael Vidales Delgado.
El experto recuerda que en el pasado programas educativos con lo último en tecnología fueron introducidos en el sistema educativo con la promesa de mejorar la calidad, como Enciclomedia, pero no tuvieron los resultados esperados.
“La política de regalar computadoras personales en las escuelas, creyendo que con eso la educación iba a mejorar, no ha funcionado, pero si los colegios introducen el iPad yo no le veo ningún inconveniente.
“El inconveniente está en su trivialización, en obnubilarse y perder la noción de dónde termina la función del docente y dónde empieza la del apoyo tecnológico”, advierte el integrante del Consejo Mexicano de Investigación Educativa.
Sus aplicaciones deben tener un contenido educativo acorde con lo que se pretende enseñar y el pequeño sólo debe manejar el aparato cuando sea pertinente y no usarlo por el afán de usarlo, dice.
“Se puede caer en una deificación del iPad, pensar que es una especie de dios que llegó para resolver todas las dificultades. El profesor puede perder el rumbo, pero lo único que puede solucionar, en parte, el problema de la educación en México es la mejoría en la forma de enseñar de los profesores”, puntualiza el investigador educativo.
Desde el punto de vista de la salud, el neurólogo pediatra Pedro Moreno González, afirma que es viable la herramienta si el colegio tiene un objetivo y metodología precisos para su manejo.
Otra de sus virtudes, comenta, podría darse en centros de neurorehabilitación, donde personas con deficiencias cognitivas o neurológicas pudieran verse beneficiadas por su pantalla multitouch e interactividad, para adquirir destreza manual, entre otras habilidades. Además, afirma, el riesgo de que un niño padezca un ataque epiléptico por fotosensibilidad por culpa del aparato es prácticamente inexistente.